room rental legal requirements and everything you need to know

Alquiler de habitaciones: requisitos legales y todo lo que debes saber

El alquiler de habitaciones es una práctica común en muchas ciudades, especialmente en aquellas con alta demanda de viviendas. Sin embargo, es importante conocer los requisitos legales y las normativas que rigen este tipo de contratos para evitar problemas y malentendidos entre arrendadores y arrendatarios.

Te explicaremos en detalle todo lo que necesitas saber sobre el alquiler de habitaciones. Desde los requisitos legales que deben cumplir los propietarios hasta los derechos y obligaciones de los inquilinos, pasando por la duración del contrato y las cláusulas más comunes que se incluyen en este tipo de acuerdo.

Si estás pensando en alquilar una habitación o eres propietario y estás considerando esta opción, este artículo te será de gran utilidad. Conocerás todos los aspectos legales y te dará la tranquilidad de saber que estás tomando decisiones informadas y protegiendo tus derechos y los de la otra parte involucrada en el contrato.

Definición de alquiler de habitaciones y su regulación legal

El alquiler de habitaciones es una modalidad de arrendamiento en la que se cede el uso y disfrute de una habitación dentro de una vivienda a cambio de una contraprestación económica. A diferencia del alquiler de viviendas completas, en este caso se comparten espacios comunes como la cocina, el baño o el salón con el propietario o con otros inquilinos.

En muchos países, el alquiler de habitaciones está regulado por la ley y es importante cumplir con una serie de requisitos legales para evitar problemas futuros. Estos requisitos pueden variar en función de la legislación de cada país o incluso de cada municipio, por lo que es fundamental informarse adecuadamente antes de proceder a alquilar una habitación.

Uno de los aspectos más importantes a tener en cuenta es la redacción de un contrato de alquiler que especifique claramente los derechos y obligaciones tanto del arrendador como del arrendatario. Este contrato debe incluir información como el precio del alquiler, la duración del contrato, las condiciones de pago, las normas de convivencia y el uso de las zonas comunes, entre otros aspectos relevantes.

Beneficios y puntos clave del alquiler de habitaciones

El alquiler de habitaciones puede ser una opción muy interesante tanto para propietarios como para inquilinos. A continuación, se detallan algunos de los beneficios y puntos clave de esta modalidad de arrendamiento:

  • Rentabilidad económica: Alquilar habitaciones puede ser una forma de obtener ingresos adicionales para el propietario de la vivienda. Esto es especialmente relevante en zonas turísticas o con alta demanda de alojamiento.
  • Ahorro para el inquilino: Alquilar una habitación en lugar de una vivienda completa puede suponer un ahorro significativo en el coste mensual de alquiler, lo que puede resultar especialmente beneficioso para estudiantes o personas con recursos económicos limitados.
  • Compartir gastos: Al vivir en una vivienda compartida, los gastos como el agua, la luz o el internet se dividen entre los inquilinos, lo que puede suponer un ahorro considerable en comparación con vivir en una vivienda individual.
  • Convivencia y socialización: Compartir una vivienda con otras personas puede ser una experiencia enriquecedora, ya que permite establecer relaciones sociales y compartir experiencias con personas de diferentes culturas y estilos de vida.

Es importante destacar que tanto el propietario como el inquilino deben tener claras las condiciones y normas de convivencia antes de formalizar el contrato de alquiler. Establecer reglas básicas de convivencia y respeto mutuo es fundamental para evitar conflictos y garantizar una buena relación entre las partes involucradas.

Ejemplos y casos de uso del alquiler de habitaciones

El alquiler de habitaciones puede ser una opción adecuada en diferentes situaciones. A continuación, se presentan algunos ejemplos y casos de uso:

  1. Estudiantes universitarios: Muchos estudiantes eligen alquilar habitaciones cerca de su centro de estudios para evitar desplazamientos largos y costosos. Además, vivir en un ambiente compartido con otros estudiantes puede facilitar la adaptación a la vida universitaria y fomentar el intercambio de conocimientos.
  2. Profesionales que se desplazan por trabajo: En el caso de profesionales que deben desplazarse temporalmente a otra ciudad por motivos laborales, el alquiler de habitaciones puede ser una alternativa más económica y cómoda que hospedarse en un hotel o alquilar una vivienda completa.
  3. Personas que buscan ampliar su círculo social: Alquilar una habitación en una vivienda compartida puede ser una opción interesante para aquellas personas que desean conocer gente nueva y ampliar su círculo social. Esto es especialmente relevante para personas que se mudan a una ciudad nueva o que buscan establecer nuevas amistades.

Como se puede apreciar, el alquiler de habitaciones puede adaptarse a diferentes necesidades y situaciones. Es importante evaluar cuidadosamente las condiciones y requisitos legales antes de tomar una decisión, tanto si se es propietario como si se es inquilino.

Diferencias entre alquiler de habitaciones y alquiler de viviendas

El alquiler de habitaciones y el alquiler de viviendas son dos modalidades de arrendamiento que presentan algunas diferencias importantes. Aunque ambos implican el uso de un espacio habitable a cambio de un pago, existen requisitos legales y particularidades específicas para cada uno.

En el caso del alquiler de habitaciones, se trata de un contrato de arrendamiento en el que el propietario cede el uso de una o varias habitaciones dentro de una vivienda que él mismo habita. Es común que se compartan áreas comunes como la cocina, el baño o el salón. Por otro lado, el alquiler de viviendas se refiere al arrendamiento de una vivienda en su totalidad, sin la presencia del propietario.

Es importante tener en cuenta estas diferencias a la hora de establecer un contrato de alquiler de habitaciones, ya que los requisitos legales y las obligaciones de las partes pueden variar.

Requisitos legales para el alquiler de habitaciones

En muchos países, el alquiler de habitaciones se rige por leyes específicas que difieren de las que regulan el alquiler de viviendas. Estas leyes suelen establecer requisitos adicionales para garantizar la seguridad y protección de los inquilinos.

Algunos de los requisitos legales más comunes para el alquiler de habitaciones incluyen:

  1. Contrato de arrendamiento: Es fundamental contar con un contrato de arrendamiento escrito que establezca las condiciones del alquiler, como la duración, el monto de la renta y las responsabilidades de las partes.
  2. Registro del contrato: En algunos países, es necesario registrar el contrato de alquiler de habitaciones ante las autoridades competentes para que tenga validez legal.
  3. Condiciones de habitabilidad: El propietario está obligado a proporcionar una habitación en condiciones adecuadas de higiene, seguridad y confort, cumpliendo con las normativas locales.
  4. Uso de áreas comunes: Es importante establecer en el contrato las normas de uso de las áreas comunes, como la cocina o el baño, para evitar conflictos entre los inquilinos.
  5. Pago de servicios: Dependiendo del acuerdo alcanzado, el inquilino puede estar obligado a pagar una parte de los servicios básicos, como el agua, la electricidad o el gas.

Beneficios del alquiler de habitaciones

El alquiler de habitaciones puede ser una opción atractiva tanto para propietarios como para inquilinos. Algunos de los beneficios más destacados son:

  • Rentabilidad: Para los propietarios, alquilar habitaciones dentro de su vivienda les permite obtener un ingreso adicional sin tener que asumir la responsabilidad de un alquiler de vivienda completa.
  • Ahorro de costes: Para los inquilinos, el alquiler de habitaciones suele ser más económico que el alquiler de una vivienda completa, lo que les permite ahorrar dinero.
  • Compartir gastos: Al compartir áreas comunes con otros inquilinos, se pueden repartir los gastos de servicios básicos, lo que puede resultar en un ahorro significativo.
  • Convivencia social: El alquiler de habitaciones brinda la oportunidad de convivir con otras personas, fomentando la socialización y la creación de relaciones personales.

Es importante destacar que el alquiler de habitaciones también puede presentar desventajas y retos, como la convivencia con personas desconocidas o la falta de privacidad. Antes de optar por esta opción, es recomendable evaluar detenidamente las necesidades y preferencias individuales.

El alquiler de habitaciones es una alternativa interesante tanto para propietarios como para inquilinos, con requisitos legales específicos y beneficios particulares. Antes de formalizar un contrato de alquiler de habitaciones, es esencial informarse sobre las leyes y regulaciones locales y considerar cuidadosamente los aspectos prácticos y económicos de esta modalidad de arrendamiento.

Requisitos legales para el alquiler de habitaciones

El alquiler de habitaciones es una práctica común en muchos países, especialmente en áreas urbanas donde el costo de vida es alto. Sin embargo, es importante tener en cuenta los requisitos legales que deben cumplirse al momento de alquilar una habitación para evitar problemas legales y proteger los derechos tanto del arrendador como del arrendatario.

En primer lugar, es necesario tener un contrato de alquiler firmado por ambas partes. Este contrato debe incluir información detallada sobre la habitación, como el tamaño, ubicación y condiciones de uso. También debe especificar el precio del alquiler, la duración del contrato y las responsabilidades de cada parte.

Es importante destacar que el contrato de alquiler de habitaciones tiene algunas particularidades en comparación con otros contratos de alquiler. Por ejemplo, no es necesario registrar el contrato en una entidad gubernamental, como suele ser el caso de los contratos de alquiler de viviendas completas. Sin embargo, es recomendable guardar una copia del contrato firmado por ambas partes como respaldo en caso de futuras disputas.

Además del contrato de alquiler, es importante cumplir con las leyes locales relacionadas con el alquiler de habitaciones. Esto puede incluir requisitos específicos sobre la seguridad y habitabilidad de la habitación, como la instalación de sistemas de alarma contra incendios, ventilación adecuada y acceso a servicios básicos como agua caliente y electricidad.

Es recomendable realizar un inventario detallado de los muebles y objetos proporcionados en la habitación al momento de la firma del contrato. Esto ayudará a evitar disputas futuras sobre posibles daños o pérdidas de propiedad. El inventario debe ser firmado por ambas partes y adjuntado al contrato de alquiler.

Es importante destacar que el alquiler de habitaciones puede tener beneficios tanto para el arrendador como para el arrendatario. Para el arrendador, puede representar una fuente adicional de ingresos y aprovechar al máximo el espacio disponible. Para el arrendatario, puede representar una opción más económica en comparación con el alquiler de una vivienda completa.

Ejemplos de casos de uso y beneficios

Imaginemos el caso de un estudiante que se muda a una ciudad para cursar sus estudios universitarios. En lugar de alquilar un departamento completo, decide alquilar una habitación en una casa compartida. Esto le permite ahorrar dinero en el alquiler y gastos adicionales, como el mantenimiento del hogar. Además, puede aprovechar la compañía y apoyo de otros estudiantes que también viven en la misma casa.

Otro ejemplo común es el de las personas que se mudan a una ciudad por trabajo temporal o por proyectos específicos. En lugar de alquilar una vivienda completa, optan por alquilar una habitación en un apartamento compartido. Esto les permite ahorrar dinero en el alquiler y tener más flexibilidad para cambiar de ubicación según sea necesario.

El alquiler de habitaciones puede ser una opción conveniente tanto para el arrendador como para el arrendatario. Sin embargo, es importante cumplir con los requisitos legales correspondientes y tener un contrato de alquiler en vigor para proteger los derechos de ambas partes. Además, es recomendable realizar un inventario detallado de los muebles y objetos proporcionados en la habitación para evitar disputas futuras. ¡Aprovecha al máximo las ventajas del alquiler de habitaciones!

Contrato de alquiler de habitaciones: elementos esenciales

El contrato de alquiler de habitaciones es un acuerdo legal que establece los derechos y obligaciones tanto del propietario como del inquilino. Aunque puede parecer menos formal que un contrato de alquiler de vivienda, es igualmente importante cumplir con los requisitos legales para evitar problemas futuros.

Para que un contrato de alquiler de habitaciones sea válido, debe contener ciertos elementos esenciales:

  1. Identificación de las partes: El contrato debe incluir los datos personales completos del propietario y del inquilino, como nombres completos, direcciones y números de teléfono.
  2. Descripción de la habitación: Es importante detallar las características de la habitación, como su ubicación dentro del inmueble, tamaño y servicios incluidos (como acceso a baño compartido, cocina, etc.).
  3. Duración del contrato: Se debe establecer la duración del contrato, ya sea por un período determinado (por ejemplo, seis meses o un año) o por tiempo indefinido.
  4. Precio y forma de pago: El contrato debe especificar el precio del alquiler y la forma en que se realizará el pago (mensual, trimestral, etc.). También se pueden incluir cláusulas sobre el depósito de garantía y el reajuste del precio.
  5. Obligaciones del propietario: El contrato debe establecer las responsabilidades del propietario, como el mantenimiento de las áreas comunes, suministro de servicios básicos y resolución de problemas estructurales.
  6. Obligaciones del inquilino: Se deben detallar las obligaciones del inquilino, como el cuidado de la habitación, el respeto a las normas de convivencia y el pago puntual del alquiler.
  7. Normas de convivencia: Es recomendable incluir cláusulas que establezcan las reglas de convivencia, como el horario de silencio, el acceso a áreas comunes y la prohibición de fumar o tener mascotas.
  8. Terminación del contrato: Se deben establecer las formas en que el contrato puede ser terminado, ya sea por mutuo acuerdo, por incumplimiento de alguna de las partes o por causas legales específicas.

Es importante que ambas partes revisen y entiendan todas las cláusulas del contrato antes de firmarlo. Si alguna de las partes tiene dudas o desea realizar modificaciones, es recomendable buscar asesoramiento legal para asegurarse de que se cumplan todos los requisitos legales.

Además de los elementos esenciales mencionados, es posible incluir cláusulas adicionales que beneficien a ambas partes. Por ejemplo, se pueden establecer horarios de visita, condiciones de uso de los servicios comunes o incluso la posibilidad de subarrendar la habitación.

En caso de que surjan desacuerdos o problemas durante la vigencia del contrato, es importante contar con pruebas y documentación que respalden los derechos de cada parte. Por ello, se recomienda que tanto el propietario como el inquilino mantengan un registro de los pagos de alquiler, las comunicaciones y cualquier otro documento relevante.

El contrato de alquiler de habitaciones es un documento legal que establece los derechos y obligaciones tanto del propietario como del inquilino. Para que sea válido, debe contener elementos esenciales como la identificación de las partes, la descripción de la habitación, la duración del contrato, el precio y forma de pago, las obligaciones de ambas partes, las normas de convivencia y las formas de terminación del contrato. Es recomendable buscar asesoramiento legal para asegurarse de que se cumplan todos los requisitos legales y contar con documentación que respalde los derechos de cada parte.

Derechos y obligaciones del propietario y del inquilino en el alquiler de habitaciones

En el alquiler de habitaciones, tanto el propietario como el inquilino tienen derechos y obligaciones que deben cumplir. Estos derechos y obligaciones están establecidos por la ley y son fundamentales para garantizar una relación justa y equitativa entre ambas partes.

Derechos del propietario:

El propietario tiene el derecho de recibir el pago del alquiler acordado en el contrato en la fecha estipulada. Además, tiene derecho a que el inquilino utilice la habitación de manera adecuada, respetando las normas de convivencia y no causando daños a la propiedad.

El propietario también tiene el derecho de acceder a la habitación para realizar reparaciones o inspecciones, siempre y cuando se le notifique con antelación y se respeten los horarios establecidos.

En caso de incumplimiento por parte del inquilino, el propietario tiene el derecho de solicitar el desalojo de la habitación y reclamar los daños ocasionados.

Derechos del inquilino:

El inquilino tiene el derecho de disfrutar de la habitación alquilada en las condiciones acordadas en el contrato. Además, tiene el derecho a la privacidad y a que se respete su tranquilidad.

El inquilino también tiene el derecho de recibir un recibo de pago por el alquiler y de solicitar la devolución de la fianza al finalizar el contrato, siempre y cuando no haya daños en la habitación.

En caso de incumplimiento por parte del propietario, el inquilino tiene el derecho de reclamar reparaciones necesarias y, en casos extremos, la rescisión del contrato.

Obligaciones del propietario:

El propietario está obligado a entregar la habitación en buen estado de conservación y a realizar las reparaciones necesarias para mantenerla en condiciones adecuadas de habitabilidad.

También está obligado a respetar la privacidad y la tranquilidad del inquilino, evitando cualquier tipo de intrusión o acoso.

Además, el propietario debe cumplir con las normas de seguridad establecidas por la ley, como la instalación de detectores de humo y extintores en zonas comunes.

Obligaciones del inquilino:

El inquilino está obligado a pagar el alquiler en la fecha acordada y a utilizar la habitación de manera adecuada, respetando las normas de convivencia establecidas por el propietario.

También está obligado a cuidar la habitación y a realizar reparaciones menores, como cambiar bombillas o reparar pequeños desperfectos.

El inquilino debe respetar las normas de seguridad y convivencia establecidas por el propietario, evitando cualquier comportamiento que pueda causar molestias a los demás inquilinos.

Consejos prácticos:

  • Antes de firmar un contrato de alquiler de habitación, es importante leerlo detenidamente y asegurarse de entender todas las cláusulas y condiciones.
  • Es recomendable realizar un inventario detallado de los muebles y enseres que se encuentren en la habitación al momento de la firma del contrato, para evitar problemas futuros.
  • En caso de cualquier incidencia o conflicto, es aconsejable mantener una comunicación abierta y respetuosa con el propietario, buscando siempre llegar a acuerdos amistosos.
  • Siempre es conveniente contar con un seguro de hogar que cubra posibles daños o responsabilidades que puedan surgir durante el periodo de alquiler.

Conocer los derechos y obligaciones tanto del propietario como del inquilino en el alquiler de habitaciones es fundamental para mantener una relación armoniosa y evitar posibles conflictos. Cumplir con estas obligaciones y derechos contribuirá a una convivencia tranquila y satisfactoria para ambas partes.

Resolución de conflictos en el alquiler de habitaciones

Cuando se trata de alquilar una habitación, es importante conocer los requisitos legales y comprender cómo resolver posibles conflictos que puedan surgir durante el proceso. En esta sección, analizaremos las diferentes formas de resolver disputas en el alquiler de habitaciones y brindaremos consejos prácticos para garantizar una experiencia positiva tanto para los arrendatarios como para los propietarios.

1. Negociación y comunicación

El primer paso para resolver cualquier conflicto en el alquiler de habitaciones es intentar llegar a un acuerdo a través de la negociación y la comunicación efectiva. Esto implica que ambas partes expresen sus preocupaciones y necesidades de manera clara y respetuosa. Algunos puntos clave a tener en cuenta durante la negociación incluyen:

  • Establecer un ambiente de diálogo abierto y respetuoso.
  • Escuchar activamente las preocupaciones y puntos de vista de la otra parte.
  • Buscar soluciones mutuamente beneficiosas.
  • Llegar a un acuerdo por escrito para evitar malentendidos futuros.

Por ejemplo, si el arrendatario tiene problemas con el ruido proveniente de otra habitación, puede hablar con el propietario y acordar un horario de silencio o establecer reglas claras para evitar molestias.

2. Mediación

Si la negociación directa no es suficiente para resolver el conflicto, se puede recurrir a la mediación. La mediación es un proceso en el que un tercero neutral, el mediador, ayuda a las partes a encontrar una solución mutuamente aceptable. El mediador facilita la comunicación y ayuda a explorar opciones y alternativas para resolver el conflicto.

La mediación puede ser especialmente útil cuando las partes tienen dificultades para comunicarse o si el conflicto es complejo. El mediador no toma decisiones, sino que ayuda a las partes a llegar a un acuerdo por sí mismas. Este enfoque colaborativo puede ser menos costoso y más rápido que acudir a los tribunales.

3. Arbitraje

Si la mediación no logra llegar a un acuerdo, se puede considerar el arbitraje como una forma de resolver el conflicto. En el arbitraje, un tercero imparcial, el árbitro, escucha los argumentos de ambas partes y toma una decisión vinculante. A diferencia de la mediación, en el arbitraje, el árbitro tiene la autoridad para tomar una decisión final.

El arbitraje puede ser una opción más rápida que ir a los tribunales y ofrece una resolución definitiva al conflicto. Sin embargo, es importante tener en cuenta que las decisiones del árbitro son vinculantes y no se pueden apelar a menos que existan circunstancias excepcionales.

4. Recurso a los tribunales

Si todas las opciones anteriores fallan, el último recurso es acudir a los tribunales. Esto implica presentar una demanda legal ante un tribunal competente y dejar que el juez tome una decisión final. Sin embargo, el proceso judicial puede ser costoso y llevar mucho tiempo.

Es importante tener en cuenta que, antes de recurrir a los tribunales, es recomendable haber agotado otras opciones de resolución de conflictos, como la negociación, la mediación y el arbitraje.

En conclusión,

Resolver conflictos en el alquiler de habitaciones requiere un enfoque proactivo y una comunicación efectiva entre las partes involucradas. La negociación y la mediación son herramientas útiles para resolver disputas de manera amigable y evitar costos innecesarios en el sistema legal. Sin embargo, si todas las opciones fallan, es posible recurrir al arbitraje o, en última instancia, a los tribunales para obtener una resolución final.

Impuestos y tributación en el alquiler de habitaciones

El alquiler de habitaciones puede generar dudas en cuanto a los impuestos y la tributación que deben cumplirse. Es importante entender las obligaciones fiscales y los beneficios que pueden obtenerse al cumplir con estas responsabilidades.

Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF)

El arrendador de una habitación en su vivienda principal está sujeto al IRPF, ya que los ingresos obtenidos por el alquiler deben declararse en la declaración de la renta. Es importante tener en cuenta que, si se cumplen ciertos requisitos, se puede aplicar la reducción del 60% en el rendimiento neto del alquiler. Esta reducción puede ser aplicada si se cumple con los siguientes puntos:

  1. La vivienda debe constituir la residencia habitual del arrendador.
  2. La habitación alquilada debe formar parte de la vivienda habitual.
  3. El inquilino debe utilizar la habitación como residencia habitual y permanente.

Si se cumplen estos requisitos, el arrendador puede beneficiarse de un importante ahorro fiscal.

Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA)

El alquiler de habitaciones no está sujeto al IVA si se trata de una vivienda habitual y permanente del arrendador. Sin embargo, si el arrendador ofrece servicios adicionales como limpieza o desayuno, estos servicios estarán sujetos al IVA.

Es importante tener en cuenta que, si el arrendador tiene varios inmuebles y decide alquilar más de una habitación, es posible que deba darse de alta en el régimen de IVA y facturar con este impuesto.

Obligaciones fiscales del inquilino

El inquilino de una habitación en alquiler también tiene ciertas obligaciones fiscales. Debe incluir el alquiler de la habitación en su declaración de la renta, ya que este ingreso se considera rendimiento del capital inmobiliario. El inquilino debe declarar el alquiler y, en caso de tener más de una vivienda en alquiler, deberá presentar la declaración del modelo 179.

Consejos prácticos

Para evitar problemas con la tributación en el alquiler de habitaciones, es recomendable seguir estos consejos:

  1. Llevar un registro detallado de los ingresos y gastos relacionados con el alquiler.
  2. Consultar a un asesor fiscal para asegurarse de cumplir correctamente con las obligaciones tributarias.
  3. Mantenerse informado sobre posibles cambios en la normativa fiscal que puedan afectar al alquiler de habitaciones.

Es fundamental tener en cuenta las obligaciones fiscales tanto para el arrendador como para el inquilino en el alquiler de habitaciones. Cumplir con estas obligaciones puede generar beneficios fiscales y evitar problemas legales en el futuro.

Preguntas frecuentes

1. ¿Cuáles son los requisitos legales para alquilar una habitación?

Los requisitos pueden variar según el país y la ciudad, pero generalmente se requiere un contrato de alquiler, identificación del arrendador y del arrendatario, y cumplir con las normativas de seguridad y salubridad.

2. ¿Es necesario firmar un contrato de alquiler para alquilar una habitación?

, es recomendable firmar un contrato de alquiler para establecer los derechos y obligaciones tanto del arrendador como del arrendatario.

3. ¿Puedo alquilar una habitación si no tengo experiencia previa como arrendador?

, no es necesario tener experiencia previa. Sin embargo, es importante informarse y cumplir con todas las normativas legales y fiscales.

4. ¿Cuánto tiempo dura un contrato de alquiler de habitación?

El tiempo de duración puede variar, pero generalmente los contratos de alquiler de habitación son a corto plazo, como por meses o incluso semanalmente.

5. ¿Puedo subarrendar una habitación que he alquilado?

Depende de lo establecido en el contrato de alquiler. Algunos contratos permiten el subarriendo, mientras que otros lo prohíben. Es importante leer y entender los términos del contrato.

6. ¿Qué responsabilidades tiene el arrendador en el alquiler de una habitación?

El arrendador es responsable de mantener la habitación en buen estado de uso y conservación, realizar reparaciones necesarias, y cumplir con las normativas legales y fiscales.

alquiler de habitaciones requisitos legales y todo lo que debes saber

Publicaciones Similares

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *