Prescripción penal en Argentina: ¿Cuándo es tarde para actuar?
La prescripción penal es un concepto fundamental en el ámbito jurídico, que determina el plazo máximo en el cual se puede iniciar una acción penal contra una persona. En Argentina, este plazo varía según el delito cometido y puede llegar a ser un tema confuso para aquellos que no están familiarizados con el sistema judicial.
Te explicaremos en detalle qué es la prescripción penal, cómo se calcula el plazo de prescripción en Argentina y cuáles son las consecuencias de la prescripción de un delito. También abordaremos ejemplos prácticos para que puedas comprender mejor este concepto y cómo afecta a los involucrados en un proceso penal.
Al leer este artículo, podrás entender de manera clara y precisa qué implica la prescripción penal en Argentina y cómo puede afectar tanto a las víctimas como a los acusados en un proceso judicial. Además, contarás con información práctica para saber cuándo es tarde para actuar y qué hacer en caso de que te encuentres en una situación donde la prescripción sea un factor determinante.
Qué es la prescripción penal
La prescripción penal es un concepto fundamental en el ámbito jurídico que establece el plazo máximo en el cual se puede ejercer la acción penal contra una persona por la comisión de un delito. En otras palabras, es el límite temporal que tiene el Estado para perseguir y sancionar a un imputado por un hecho delictivo.
La prescripción penal tiene como objetivo principal garantizar la seguridad jurídica y evitar que las personas vivan en una constante incertidumbre sobre la posibilidad de ser sometidas a un proceso penal. Asimismo, busca evitar la prolongación indefinida de los procesos judiciales y promover la celeridad en la administración de justicia.
En Argentina, la prescripción penal está regulada por el Código Penal y establece diferentes plazos según la gravedad de los delitos. Por ejemplo, para los delitos de acción pública perseguibles de oficio, el plazo de prescripción es de 20 años. Mientras que para los delitos de acción privada, el plazo puede variar desde los 6 meses hasta los 5 años, dependiendo de la pena máxima prevista para el delito en cuestión.
Es importante destacar que la prescripción penal no implica la extinción de la responsabilidad penal de una persona, sino que simplemente impide que se inicie o continúe un proceso penal en su contra. Sin embargo, si el imputado ha sido condenado y se encuentra cumpliendo una pena, la prescripción no tiene efecto y la persona deberá cumplir la pena impuesta.
Casos de uso y beneficios de la prescripción penal
La prescripción penal cumple un papel fundamental en el sistema de justicia penal. Algunos de los casos de uso y beneficios de la prescripción penal son:
- Protección de los derechos del imputado: La prescripción penal garantiza que una persona no sea perseguida eternamente por un delito cometido en el pasado. Esto evita que se abuse del poder punitivo del Estado y se vulneren los derechos fundamentales del imputado, como el derecho a la defensa y a un juicio justo.
- Promoción de la celeridad procesal: La prescripción penal contribuye a agilizar los procesos judiciales, evitando que se prolonguen indefinidamente. Esto es especialmente importante en casos en los que la prueba se puede deteriorar con el paso del tiempo o en los que el imputado ha demostrado un cambio positivo en su conducta durante el transcurso de los años.
- Estímulo para la investigación y persecución temprana: La prescripción penal motiva a los órganos de investigación y persecución penal a actuar de manera diligente y eficiente. Sabiendo que existe un plazo límite para ejercer la acción penal, se fomenta la recolección temprana de pruebas y la realización de diligencias necesarias para esclarecer los hechos.
La prescripción penal es una institución jurídica que establece los plazos máximos en los que el Estado puede perseguir penalmente a una persona por la comisión de un delito. Su objetivo es garantizar la seguridad jurídica y promover la celeridad en la administración de justicia. Además, la prescripción penal protege los derechos del imputado, agiliza los procesos judiciales y estimula la investigación y persecución temprana de los delitos.
Plazos de prescripción según el tipo de delito
La prescripción penal es un concepto fundamental en el derecho penal argentino. Se refiere al tiempo máximo que tiene el Estado para iniciar un proceso penal en contra de una persona que ha cometido un delito. Si el plazo de prescripción ha vencido, la persona no puede ser juzgada ni condenada por ese delito.
En Argentina, los plazos de prescripción varían según el tipo de delito. A continuación, se detallan los plazos establecidos por el Código Penal argentino:
Delitos de acción pública
Los delitos de acción pública son aquellos que pueden ser perseguidos por cualquier persona, incluso si no ha sido víctima del delito. Estos delitos incluyen, por ejemplo, el homicidio, la violación y el robo.
Para los delitos de acción pública, el plazo de prescripción varía según la pena máxima establecida para el delito en cuestión. Si la pena máxima es de hasta 3 años de prisión, el plazo de prescripción es de 2 años. Si la pena máxima es de más de 3 años, el plazo de prescripción es de 5 años.
Es importante tener en cuenta que, en algunos casos, el plazo de prescripción puede ser suspendido o interrumpido. Por ejemplo, si el imputado se encuentra prófugo, el plazo de prescripción se suspende hasta que sea capturado. Además, si se inicia una investigación o se dicta un auto de procesamiento, el plazo de prescripción se interrumpe y comienza a correr nuevamente desde cero.
Delitos de acción privada
Los delitos de acción privada son aquellos que solo pueden ser perseguidos por la persona afectada por el delito. Estos delitos incluyen, por ejemplo, la calumnia, la difamación y las lesiones leves.
En el caso de los delitos de acción privada, el plazo de prescripción es de 1 año. Sin embargo, es importante tener en cuenta que este plazo puede ser interrumpido si se inicia una acción penal, como la presentación de una denuncia.
Delitos de acción pública condicionada
Los delitos de acción pública condicionada son aquellos que solo pueden ser perseguidos si la víctima o el querellante inicia una acción penal. Estos delitos incluyen, por ejemplo, la estafa y el hurto.
Para los delitos de acción pública condicionada, el plazo de prescripción es de 3 años. Sin embargo, al igual que en los delitos de acción privada, este plazo puede ser interrumpido si se inicia una acción penal.
Beneficios y puntos clave de la prescripción penal
La prescripción penal cumple varios objetivos importantes en el sistema de justicia penal argentino. Algunos de los beneficios y puntos clave de la prescripción son:
- Evita la persecución eterna: La prescripción garantiza que una persona no sea perseguida por un delito de manera indefinida. Esto evita que una persona viva constantemente bajo la amenaza de un proceso penal y permite que las personas puedan reconstruir sus vidas después de un tiempo determinado.
- Promueve la celeridad procesal: La prescripción tiene como objetivo incentivar una actuación diligente por parte de las autoridades judiciales. Al establecer plazos para la persecución penal, se busca evitar la dilación injustificada de los procesos y promover la celeridad en la resolución de los casos.
- Protege los derechos de las víctimas: La prescripción no solo protege los derechos de las personas acusadas de un delito, sino también los derechos de las víctimas. Permite que las víctimas obtengan justicia de manera oportuna y evita que se prolongue su sufrimiento y angustia.
Es importante tener en cuenta que la prescripción no siempre es automática. En algunos casos, es necesario que la persona acusada de un delito presente una excepción de prescripción ante el tribunal correspondiente. Para ello, es recomendable contar con la asesoría de un abogado especializado en derecho penal.
Los plazos de prescripción en Argentina varían según el tipo de delito. La prescripción penal cumple varios objetivos importantes, como evitar la persecución eterna, promover la celeridad procesal y proteger los derechos de las víctimas. Si tienes dudas sobre la prescripción en un caso específico, es recomendable consultar con un abogado para obtener asesoramiento legal adecuado.
Causas que interrumpen la prescripción penal
La prescripción penal es un concepto fundamental en el ámbito del derecho penal argentino. Se refiere al tiempo máximo que tiene el Estado para ejercer su acción punitiva sobre un delito cometido. Sin embargo, existen ciertas circunstancias que pueden interrumpir o suspender dicho plazo de prescripción.
1. La comisión de nuevos delitos
Uno de los casos más comunes que interrumpe la prescripción penal es la comisión de nuevos delitos por parte del autor del hecho delictivo inicial. En este escenario, el plazo de prescripción se reinicia y se calcula a partir de la fecha en que se cometió el último delito. Es importante tener en cuenta que los nuevos delitos deben estar relacionados con la conducta delictiva original para que se produzca esta interrupción.
Por ejemplo, si una persona comete un robo y luego comete un homicidio, el plazo de prescripción para ambos delitos se calculará a partir de la fecha en que se cometió el homicidio.
2. La denuncia o querella
Otro factor que puede interrumpir la prescripción penal es la presentación de una denuncia o querella por parte de la víctima o de alguien que tenga un interés legítimo en el caso. En este caso, el plazo de prescripción se suspende hasta que se resuelva la denuncia o querella.
Es importante destacar que la presentación de una denuncia o querella puede realizarse en cualquier momento, incluso cuando el delito ha prescrito. Sin embargo, si el delito ya ha prescrito, la acción penal no podrá ser ejercida, pero la denuncia o querella puede ser útil para otros fines, como la reparación civil.
3. La persecución penal
La persecución penal también puede interrumpir la prescripción. Esto ocurre cuando se inicia un proceso judicial en el que se imputa al presunto autor del delito. En este caso, el plazo de prescripción se suspende hasta que se dicte una sentencia definitiva o se produzca una resolución que ponga fin al proceso.
Es importante tener en cuenta que la persecución penal debe ser activa y diligente. Si el proceso judicial se dilata excesivamente sin justificación, puede considerarse que no se ha interrumpido la prescripción.
4. La interposición de recursos
La interposición de recursos también puede interrumpir la prescripción penal. Cuando se presenta un recurso contra una resolución judicial, el plazo de prescripción se suspende hasta que se resuelva dicho recurso. Esto se debe a que, durante el trámite del recurso, el proceso judicial está en curso y, por lo tanto, se considera que la persecución penal está activa.
Es importante mencionar que la interposición de recursos debe ser oportuna y cumplir con los requisitos legales para que tenga efecto en la interrupción de la prescripción.
5. La conciliación o mediación
En algunos casos, la conciliación o mediación entre el imputado y la víctima puede interrumpir la prescripción penal. Si las partes llegan a un acuerdo y se pone fin al conflicto de manera pacífica, el plazo de prescripción se suspende hasta que se dicta la resolución judicial que homologa el acuerdo.
Es importante destacar que la conciliación o mediación solo puede interrumpir la prescripción en delitos que sean susceptibles de ser conciliados o mediados según la legislación vigente.
La prescripción penal puede ser interrumpida por diferentes causas, como la comisión de nuevos delitos, la presentación de una denuncia o querella, la persecución penal, la interposición de recursos y la conciliación o mediación. Es importante tener en cuenta estas circunstancias para determinar si es tarde para actuar en un caso específico.
La prescripción penal en el Código Penal argentino
La prescripción penal es un concepto fundamental en el ámbito jurídico argentino, ya que establece el tiempo límite en el cual se puede iniciar una acción penal contra una persona acusada de cometer un delito. El Código Penal argentino establece diferentes plazos de prescripción, dependiendo de la gravedad del delito y la pena máxima prevista.
La prescripción penal tiene como objetivo principal garantizar la seguridad jurídica y evitar que las personas vivan en constante incertidumbre respecto a la posibilidad de ser juzgadas por un delito cometido en el pasado. Además, busca evitar que los procesos penales se eternicen y se conviertan en una carga para el sistema judicial.
Es importante destacar que la prescripción penal puede variar dependiendo del tipo de delito. Por ejemplo, los delitos de lesiones leves tienen un plazo de prescripción de 2 años, mientras que los delitos de homicidio no tienen plazo de prescripción, es decir, pueden ser perseguidos en cualquier momento.
Beneficios y puntos clave de la prescripción penal
La prescripción penal tiene varios beneficios y puntos clave que es importante tener en cuenta. A continuación, se detallan algunos de ellos:
- Garantía de seguridad jurídica: La prescripción penal garantiza que una persona no pueda ser juzgada eternamente por un delito cometido en el pasado, lo que otorga certeza y estabilidad en las relaciones sociales.
- Evita la impunidad: La prescripción penal establece un plazo razonable para que las víctimas o el Estado inicien una acción penal, evitando así que los delitos queden impunes.
- Descongestiona el sistema judicial: Al establecer plazos de prescripción, se evita que los procesos penales se eternicen y se conviertan en una carga para el sistema judicial. Esto permite que los recursos judiciales se destinen a casos más urgentes y relevantes.
Ejemplos y casos de uso
Para comprender mejor cómo funciona la prescripción penal, es útil analizar algunos ejemplos concretos:
- Ejemplo 1: Juan es acusado de cometer un robo a mano armada en 2010. Según el Código Penal argentino, el delito de robo prescribe a los 10 años. Si la víctima decide iniciar una acción penal en 2022, el delito ya habrá prescrito y Juan no podrá ser juzgado por ese hecho.
- Ejemplo 2: María es acusada de cometer un delito de estafa en 2015. Según el Código Penal, el delito de estafa prescribe a los 6 años. Si la víctima decide iniciar una acción penal en 2022, el delito aún no ha prescrito y María puede ser juzgada por ese hecho.
Consejos prácticos y recomendaciones
Si te encuentras en una situación en la que crees que un delito ha prescrito o estás interesado en iniciar una acción penal, es importante que consultes con un abogado especializado en derecho penal. Él podrá analizar tu caso específico y guiarte de acuerdo con la legislación vigente.
En caso de ser víctima de un delito, es recomendable no esperar hasta el último momento para iniciar una acción penal, ya que los plazos de prescripción pueden variar dependiendo del delito. Es importante actuar con prontitud y buscar asesoramiento legal para proteger tus derechos.
La prescripción penal es un mecanismo fundamental en el sistema jurídico argentino que busca garantizar la seguridad jurídica y evitar la impunidad. Conocer los plazos de prescripción y actuar dentro de ellos es esencial para proteger los derechos de las víctimas y garantizar un sistema de justicia eficiente.
Cuándo comienza a correr el plazo de prescripción
La prescripción penal es un concepto fundamental en el sistema jurídico argentino. Es el mecanismo legal que establece un límite de tiempo para que las acciones penales puedan ser iniciadas o continuadas. En otras palabras, la prescripción determina cuándo es tarde para actuar y perseguir un delito.
El plazo de prescripción comienza a correr a partir del momento en que se comete el delito. Sin embargo, existen algunas excepciones y particularidades dependiendo del tipo de delito y las circunstancias específicas de cada caso.
Es importante destacar que la prescripción no implica que el delito haya sido perdonado o que no sea moralmente reprochable. Simplemente establece un límite de tiempo para que se pueda ejercer la acción penal.
Para entender mejor este concepto, veamos un ejemplo práctico:
Supongamos que Juan comete un robo a mano armada el 1 de enero de 2010. En este caso, el plazo de prescripción comenzará a correr a partir de esa fecha. Si el plazo de prescripción para el delito de robo a mano armada es de 10 años, esto significa que Juan podría ser acusado y procesado por ese delito hasta el 1 de enero de 2020. Pasada esa fecha, la acción penal estaría prescrita y Juan no podría ser procesado por ese delito.
Es importante tener en cuenta que existen diferentes plazos de prescripción según el tipo de delito. Por ejemplo, los delitos más graves, como los homicidios, tienen un plazo de prescripción más largo que los delitos menores.
Además, la prescripción puede ser interrumpida o suspendida en ciertos casos. Por ejemplo, si el acusado se oculta o si se inicia un proceso penal antes de que se cumpla el plazo de prescripción, se interrumpe el plazo y este vuelve a comenzar desde cero.
Es importante mencionar que la prescripción penal puede tener consecuencias significativas para las víctimas y la sociedad en general. Por un lado, puede generar impunidad si el delincuente no es procesado dentro del plazo establecido. Por otro lado, puede brindar una medida de seguridad jurídica al establecer límites temporales para la persecución penal.
La prescripción penal en Argentina determina cuándo es tarde para actuar y perseguir un delito. El plazo de prescripción comienza a correr a partir del momento en que se comete el delito y puede variar según el tipo de delito y las circunstancias específicas. Es importante conocer los plazos de prescripción aplicables a cada delito y tomar las acciones legales correspondientes dentro de ese plazo para evitar la prescripción de la acción penal.
Consecuencias de la prescripción penal
La prescripción penal es un concepto fundamental en el sistema jurídico de Argentina. Se refiere al tiempo máximo que tiene el Estado para investigar y sancionar un delito. Cuando un delito ha prescrito, significa que ya no se puede presentar una acción penal en su contra y el acusado no puede ser juzgado ni condenado.
Es importante entender las consecuencias de la prescripción penal, tanto para las víctimas como para los acusados. En el caso de las víctimas, la prescripción puede resultar frustrante, ya que impide que se haga justicia por el delito cometido en su contra. Por otro lado, para los acusados, la prescripción puede ser un alivio, ya que evita que sean procesados y condenados por un delito del pasado.
Es necesario tener en cuenta que la prescripción penal varía según el tipo de delito y la pena máxima establecida por la ley. Por ejemplo, en delitos graves como el homicidio, el plazo de prescripción es mayor que en delitos menores como las lesiones leves. Además, el plazo de prescripción puede ser interrumpido en ciertos casos, como cuando se inicia una acción penal o se dicta una sentencia condenatoria.
Beneficios y puntos clave de la prescripción penal
La prescripción penal cumple con varios beneficios y puntos clave en el sistema jurídico. Algunos de ellos son:
- Finalidad de la pena: La prescripción penal está relacionada con la finalidad de la pena, que es la resocialización del delincuente. Cuando un delito ha prescrito, se considera que el tiempo transcurrido ha sido suficiente para que el acusado se rehabilite y se reintegre a la sociedad.
- Seguridad jurídica: La prescripción penal brinda seguridad jurídica tanto a las víctimas como a los acusados. Permite que las víctimas puedan cerrar el capítulo del delito y seguir adelante con sus vidas, sin la incertidumbre de un proceso penal prolongado. Para los acusados, la prescripción evita que vivan con el temor constante de ser juzgados y condenados por un delito del pasado.
- Economía procesal: La prescripción penal también contribuye a la economía procesal. Evita que se destinen recursos judiciales y fiscales a casos que ya no tienen posibilidad de ser juzgados. Esto permite que los recursos se concentren en casos más urgentes y relevantes.
Es importante destacar que la prescripción penal no es aplicable a todos los delitos. En casos de delitos de lesa humanidad, por ejemplo, no aplica la prescripción y se puede investigar y juzgar a los responsables en cualquier momento.
Recomendaciones y consejos prácticos
Si te encuentras en una situación en la que tienes dudas sobre si un delito ha prescrito o no, es recomendable buscar asesoramiento legal. Un abogado especializado en derecho penal podrá evaluar tu caso y orientarte sobre los plazos de prescripción aplicables.
Es importante tener en cuenta que la prescripción puede variar dependiendo de la legislación vigente y de las circunstancias específicas del caso. Por lo tanto, es fundamental contar con el apoyo de un profesional que esté actualizado en la materia.
La prescripción penal es un tema fundamental en el sistema jurídico argentino. Conocer las consecuencias, beneficios y puntos clave de la prescripción es fundamental tanto para las víctimas como para los acusados. Recuerda siempre buscar asesoramiento legal en caso de dudas sobre la prescripción de un delito.
Qué hacer si el delito prescribió
La prescripción penal es un concepto fundamental en el ámbito jurídico argentino. Cuando un delito prescribió, significa que ha pasado el tiempo establecido por la ley para que se pueda iniciar un proceso legal en su contra. En otras palabras, el Estado ya no puede ejercer su poder punitivo y el responsable del delito queda exento de cualquier responsabilidad penal.
Si te encuentras en la situación de haber sido víctima de un delito y descubres que éste ha prescrito, es importante que conozcas cuáles son tus opciones y qué hacer a continuación. Aunque el delito haya prescrito, aún puedes buscar justicia de otras formas.
1. Denuncia civil
Aunque no puedas llevar a cabo una acción penal, puedes presentar una denuncia civil contra el responsable del delito. La denuncia civil tiene como objetivo principal obtener una compensación económica por los daños y perjuicios sufridos como consecuencia del delito. Por ejemplo, si fuiste víctima de un robo y el delito ha prescrito, aún puedes demandar al responsable para obtener una indemnización por los objetos robados.
2. Prevención y concientización
Aunque el delito haya prescrito, eso no significa que no puedas tomar medidas para prevenir que otras personas sean víctimas de situaciones similares. Puedes utilizar tu experiencia para concientizar a otros sobre los riesgos y medidas de seguridad necesarias. Por ejemplo, si fuiste víctima de una estafa, puedes compartir tu historia y brindar consejos para evitar caer en situaciones similares.
3. Reforma legal
Si consideras que la prescripción del delito es injusta y que debería haber consecuencias aún después de que haya transcurrido cierto tiempo, puedes involucrarte en movimientos de reforma legal. Puedes unirte a organizaciones o participar en campañas para promover cambios en la legislación y lograr que los delitos no prescriban tan fácilmente.
Aunque el delito haya prescrito, aún existen opciones para buscar justicia y prevenir futuros delitos. Puedes presentar una denuncia civil, utilizar tu experiencia para concientizar a otros y participar en movimientos de reforma legal. Recuerda que cada caso es único y es importante consultar con un abogado para evaluar las opciones disponibles en tu situación específica.
Casos famosos de prescripción penal en Argentina
La prescripción penal es un concepto fundamental en el sistema legal argentino que determina el tiempo límite en el cual se puede iniciar un proceso penal o ejecutar una pena. Es importante entender los casos famosos de prescripción penal en Argentina para comprender mejor los beneficios y puntos clave de este concepto.
Caso 1: El caso de «La Masacre de Ezeiza«
En este caso, ocurrido en 1973, un grupo de manifestantes fue atacado por fuerzas de seguridad durante una manifestación en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza. A pesar de la gravedad de los hechos, el proceso judicial se demoró y, finalmente, prescribió en 2013 debido al largo tiempo transcurrido sin que se dictara una sentencia definitiva. Esto dejó impune uno de los hechos más trágicos de la historia argentina.
Caso 2: El caso de «Cromañón«
En el trágico incendio del boliche «Cromañón» en 2004, murieron 194 personas y más de 700 resultaron heridas. A pesar de la gravedad de los delitos cometidos por los responsables, el proceso judicial se extendió durante más de una década y, en 2016, prescribió para algunos de los acusados debido al vencimiento de los plazos establecidos por la ley.
Caso 3: El caso de «Sueños Compartidos«
En este caso de corrupción ocurrido en 2008, los responsables fueron acusados de desviar fondos destinados a la construcción de viviendas sociales. A pesar de la gran cantidad de pruebas y del impacto social que generó el hecho, el proceso judicial se prolongó durante años y, en 2018, algunos de los acusados vieron prescribir los delitos que se les imputaban.
Estos casos famosos de prescripción penal en Argentina demuestran la importancia de actuar de manera rápida y eficiente en los procesos judiciales. Si no se toman las medidas necesarias a tiempo, los delitos pueden quedar impunes y las víctimas pueden ver frustrada su búsqueda de justicia.
Consejo práctico: Si te encuentras involucrado en un proceso penal, es fundamental contar con el asesoramiento de un abogado especializado en derecho penal. Un profesional con experiencia podrá guiarte en los plazos y pasos a seguir para evitar que tu caso prescriba.
Además, es importante tener en cuenta que la prescripción penal no es un beneficio exclusivo para los acusados, sino que también puede ser utilizado por las víctimas. Si una víctima no inicia un proceso penal en un tiempo determinado, el delito puede prescribir y no se podrá perseguir a los responsables.
Los casos famosos de prescripción penal en Argentina ilustran la importancia de actuar rápidamente en los procesos judiciales para evitar la impunidad. Contar con el asesoramiento de un abogado especializado y conocer los plazos establecidos por la ley son cruciales para garantizar que se haga justicia en cada caso.
Preguntas frecuentes
1. ¿Qué es la prescripción penal?
La prescripción penal es el plazo establecido por la ley en el cual una persona puede ser juzgada por un delito. Una vez que este plazo ha vencido, el delito ya no puede ser perseguido legalmente.
2. ¿Cuándo comienza a correr el plazo de prescripción penal?
El plazo de prescripción penal comienza a correr desde el día en que se comete el delito. Sin embargo, hay ciertos casos en los que este plazo puede suspenderse o interrumpirse.
3. ¿Cuánto tiempo dura la prescripción penal en Argentina?
El plazo de prescripción penal en Argentina varía según la gravedad del delito. Para los delitos más graves, el plazo puede ser de hasta 20 años, mientras que para los delitos menos graves puede ser de 3 a 6 años.
4. ¿Qué sucede si el plazo de prescripción penal ha vencido?
Si el plazo de prescripción penal ha vencido, el delito ya no puede ser perseguido legalmente. Esto significa que la persona acusada ya no puede ser juzgada ni condenada por ese delito.
5. ¿Se puede interrumpir o suspender el plazo de prescripción penal?
Sí, el plazo de prescripción penal puede ser interrumpido o suspendido en ciertos casos. Por ejemplo, si se inicia una investigación o se dicta una sentencia condenatoria, el plazo puede detenerse o reiniciarse.
6. ¿Existe alguna excepción a la prescripción penal?
Sí, hay ciertos delitos que no prescriben, es decir, que pueden ser perseguidos legalmente en cualquier momento. Estos delitos incluyen crímenes de lesa humanidad, genocidio y tortura.